El Jefe Diego: foto, carta y comunicado






Arriba, la supuesta foto del Jefe Diego mostrando una revista, Proceso, con fecha del 10 de junio; abajo, la carta supuestamente enviada por Diego Fernández de Cevallos a su hijo:

Diego: no puedo describirte el infierno que vive tu padre y no se cuánto aguante más.

Por ello te pido que hagas lo más rápido que puedas tu mayor esfuerzo. Ellos tienen todo el tiempo del mundo, no les corre ninguna prisa. Lo mismo les da mañana que dentro de cien días. Para tu Padre lo que no sea de inmediato no tiene sentido. Me dicen que ya te hicieron una propuesta concreta y que tú no has contestado en concreto con una contraoferta razonable. Tienes que hacerlo ya, de inmediato. Si no puedes llegar a lo que piden sí puedes hacer un planteamiento que demuestre voluntad de negociar, no evasivas. Cualquier consejo de que le hagas al "pobre" es absurdo y será fatal.

Todo lo que puedas conseguir de ayuda, asegúrales que la pagaré. He tenido varios desvanecimientos y mucho dolor en el pecho a pesar del tenormín y de la aspirina. Tú sabes que no quedé bien del corazón después de la operación.

He perdido peso y mi fatiga es cada día mayor. Por eso el tiempo es determinante. Es preferible un gran esfuerzo pronto que ilusionarse con lo que ya no podrá ser después. Si te apoyas con Toño y Juan estoy seguro que rápidamente lograrás algo concreto que puedas comprometer. Insisto en que todo lo pagaré. El sólo paso de los días no moverá a estos señores pero sí los moverá favorablemente si ven con claridad tu esfuerzo. La urgencia está de nuestro lado. No se trata de desmentir el monto que se atribuye a mi patrimonio. Eso es irrelevante. Lo urgente es que hagas una contrapropuesta lo más alta que puedas y estoy seguro que ellos negociarán. Lo urgente es negociar con toda seriedad para gestionar la entrega del dinero y mi libertad

Para Udes y Liliana mi Bendición y mi Cariño

Tu padre.


Y este es un comunicado firmado por "Misteriosos desaparecedores":

No es cierta ninguna de las hablillas filtradas a los medios de comunicación respecto a la negociación ofrecida más no cumplida por la familia Fernández de Cevallos Gutiérrez a fin de lograr la liberación del jefe Diego".

No hemos reducido el monto del rescate. No ha existido comunicación telefónica alguna entre el archiduque de Escobedo y su familia. Y no se han detenido las pesquisas policiacas para dar con su paradero. lo único cierto es lo que con pasmosa astucia las autoridades han podido reconstruir. El grupo esperó que descendiera de su camioneta para someterlo y luego se lo llevaron. También es cierto, aunque eso no demuestra tanta astucia, que los órganos de inteligencia siguen sin pistas sobre el lugar donde se encuentra el incómodo desaparecido.

Mientras tanto, a más de dos meses de su desaparición, al jefe Diego le ha dado por confiarnos algunas de sus cuitas, de sus negocios, así como de sus amores y desamores -personales y políticos- aunque luego, y ya casi postrado por la depre en su nueva, forzada y recóndita curul, le ha dado por exclamar imparable y angustiosamente Diego, David, Claudia, Rodrigo, Liliana. Están ahí. Seguiremos informando.

Pobre Jefe Diego: es víctima del estado fallido que con tanto denuedo ayudó a construir.



Entradas populares de este blog

Alito y Pablo: bloqueo, mentiras y textoservidores

Imbecilidad amurallada

Doña Layda: la farsa opositora